Sin pregunta ni respuesta.

Estoy cansada de hacer como que no (nos) pasa nada, de tener que inventarme excusas absurdas para hablarte, de tener que mirarte disimuladamente para que no se note tanto que quiero comerte a besos.  Empiezo a cansarme de salir a la puerta de la clase sólo para verte, en serio ¿No te das cuenta?

¿No te das cuenta de que siempre estoy en los pasillos cuando tú tienes que pasar por ahí? ¿De verdad que no te has dado cuenta de que cada vez que me miras no soy capaz de mantenerte la mirada?   Con lo listo que eres…  parece mentira.

Parece mentira que no sepas que desde hace años escribo tu nombre en el espejo del baño para ver cómo queda junto al mío, y sinceramente… queda bien. Queda demasiado bien, tanto como las historias que me monto en mi cabeza… suenan taaaaaaan bien.

No sé, siempre he visto algo de luz entre palabra y palabra que me decías, siempre veía algo que me decía »sí, sí, le gustas, por favor pero si se está delatando» pero no, al final resultaba ser que no. Un paso hacia adelante, dos hacia atrás. Nada. Y aún así sigo.

Sigo asomándome a las ventanas por si pasas y sigo leyendo y releyendo cada pizca de esperanza de cada conversación y no, no me entra. Seré torpe o algo, pero no lo consigo entender. ¿Por qué siempre parece que sientes lo mismo que yo, y otras que sin embargo…parece todo lo contrario? De verdad, no entiendo nada. Pero sigo, sigo mirando tus fotos una y otra vez y no me canso eh, te juro que no me canso. Y te persigo, y te busco en cada momento y siempre sonríes. ¿POR QUÉ ME SONRÍES? estate quiero mejor. O no, no porque realmente eso es lo que busco, que me mires, que me hables, que me quieras.

Que me quieras como lo estoy haciendo yo, porque esto es totalmente cierto. Tan cierto como esas miradas aquella tarde en la playa, por favor… dime que no eran mentira, que no me las he inventado yo.  Dime que no estoy loca y que no estoy perdiendo el tiempo.

Trato de montar un rompecabezas que tal vez ni exista, intento averiguar si sientes o si alguna vez has sentido algo por mí. No es tan complicado, joder. Porque no me creo que no te hayas dado cuenta y como no soy capaz de decírtelo a la cara y sé que no me vas a leer… te lo digo, ERES TÚ, Y TODAS ESTAS LÍNEAS VAN POR TI.

Pero bueno quién sabe, tal vez un día me canse y el que escribas esta historia seas tú. Mientras tanto, creo que seguiré en la puerta de clase, en los pasillos, y buscando excusas para hablarte porque está claro que de momento… ni tú me vas a responder nada, ni yo te voy a preguntar.